Me lo habían contado, pero además apareció en el diario. Resulta que un grupo de travestis fueron a votar al local que les correspondía, el del Liceo José Antonio Carvajal. Y fueron como ellos acostumbran, vestidos de mujer, pintados y con esa onda que los caracteriza. Cosa que por supuesto molestó a más de alguien, ya que hasta intentaron que se fueran a cambiar para permitirles votar. Pero los travestis se resistieron y finalmente pudieron votar. Algo anecdótico, quizás, para esta ciudad pequeña que aún no se acostumbra a verlos de día y no escondidos en la noche buscando a algún cliente, tal vez de los mismos que se escandaliza de verlos aparecer en el local de votación de "hombres".
Una situación que aparte de hacerme reflexionar acerca de la homofobia, me muestra lo arcaico que es el sistema de segregación en los locales por sexo o género. Me recuerda cuando las escuelas y liceos eran de "señoritas" y "hombres". Una categoría que a todas luces no concuerda con la realidad actual.
(Foto diario Chañarcillo)
5 comentarios:
Jessica, leía que sólo en 3 o 4 países votamos en forma separada. Curioso, eh?
Sí, me parece de lo más arcaico esta división.
Otra vergüenza, ya es hora de votar en forma mixta, incluyéndo ovbio al tercer sexo, pues muchos políticos "importantes" no tienen ningún problema al convivir con los transformistas en muchas discos gay, soy testigo
Está interesante eso de los políticos en discos gays. Podrías escribir algo sobre eso
Es veradd, la división por sexos es una soberana idiotez.
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