sábado, abril 07, 2007

Señales de vida

Algunos amigos y amigas me han molestado cobn razón por la ausencia, el blog ha estado inanimado. Me provoca una sensación extraña, que he podido comprender mejor al ver otros blogs que han estado solos, sin que sus dueños les den vida, en defintiva, los habiten.
Yo he tenido algunas novedades en mi vida, desde el último post. Me tuve que cambiar de casa, un hecho un tanto involuntario. Por los mismos días me cambié de trabajo, un cambio positivo desde varias perspectivas, me tiene contenta pero con un nivel de estrés y de carga de trabajo mayor.
Hecho de menos vivir en el centro de la ciudad, llegar caminando al trabajo sin demorarme a causa de la locomoción congestionada. También extraño a varios de mis amigos y mis amigas de mi trabajo anterior, a un matrimonio que se fue de la ciudad dejándome más sola, a la bugambilia que alegraba todos los días mi otra casa.
No crean por esta enumeración de nostalgias que no estoy bien. La verdad es que estoy feliz.
De política no escribiré por el momento, a no ser que se trate de algo que tenga demasiado atorado, porque ahora trabajo para el gobierno regional de Atacama, en un puesto de esos transitorios que no sé cuánto durará, pero será muy probablemente mi plazo para retomar los comentarios de este tipo.
De literatura, periodismo y otras yerbas seguiremos hablando, los que aún quieran acompañarme en este espacio.
Se siente un poco más sola la blogósfera, hay hartos amigos y amigas que no están o que están mucho menos presentes, algunos que se han rediseñado o reinventado.
O tal vez hoy estoy especialmente nostálgica.